dPunish3r

Acaba mi año parche del bache de alcanzar la década de volteada hache. Pensamientos llueva, año de cueva, reflexionando sin ciencia la esencia de la existencia. Superado embrión cuarentón, llega orgullo cuadragenario sonrisa fluye por escenario, nuevo rumbo nace con emoción. Sentimientos en tres líneas, más entrelíneas, y de entreacto, juego de letras y números pacto: 14, edad del pavo, 41, pavo qué edad, hI, cuatro volteado I ves, hola en inglés es. ¡Hola 41!

Hoy la cuarenta atrás llega a su fin para mí, tras haber pasado este último año con los treinta y todos cierro una etapa y abro la tapa del envase de los cuarentones que no sé si llevará abre fácil para hacerlo difícil o viceversa. Los 40 suenan a Principales, y a ladrones, como banda sonora de la actualidad, pero principalmente macho suenan a mucho, no quiero pensar que el ladrón es el tiempo y que ahí va va robando cuarenta, sino que me los ha regalado y prefiero sentir que todavía hay mecha de vida, mucha, aunque sea hervida para cocinar la cruda realidad que se vislumbra no sólo en la hucha. Lleva días mi inconsciente serrando mi juventud, canturreando a Serrat con el hace veinte años que tengo veinte años, y es que yo tenía 10 cuando oía esa canción, 20 cuando la escuchaba, y pensaba qué lejos estaba yo de esa oración mirando la hora en mi reloj de estudiante donde el tiempo apenas se movía adelante. Al entrar en la vida laboral el reloj comenzó a ir mal, esa abundancia de t

Inquieto me define, creativo me describe, y la extravagancia al son va, como sombra me persigue. Mientras, yo sigo el camino para llegar al ignoto final del infinito, montado en la imaginación como vehículo para alcanzar mi hito, y aunque a viejo llegue sin conocer ese final, el viaje ya es el fin en realidad. Instagram es un medio para expresar más lo que veo, o no veo, mas medio imagino, y cojo la foto de la imagen presa entre el cerebro y el ojo. Escojo el filtro con paciencia, el que más potencia y menos filtra mi intención, y sin más intención que compartirla celebro la creación. Mi identidad por Internet es dPunisher, sí él y Noel para otro menester fuera de la red, así dúo de mí, asiduo a la tecnología, la música, y la fotografía, y a cualquier actividad que exhiba una parte creativa. Saltará a la vista que ni soy fotógrafo ni escritor de párrafos, tan sólo un alma con brotes de artista, gobernado por una mente perfeccionista, analítica, trato de aprender de ti yo, para prender

Publico protesta para persona pedorra porque pintó poco perfecto Punisher para prenda propia. Personaje, piensa, practica, pero por profesionalidad pinta pertenencia poniendo P pues procedía. Pudo pasarle parada pensante, pimplando pote pacharán, provocando poca precisión poniendo palabra Punisher, produciendo particularmente producto porculero para Puni. Pensamiento puesto público, publico peste para pibe papanatas... provéete picando peras, pelando plátanos, percibirás proteínas, propician potencia para pensar. Pon pasión, pocas prisas, para perpetrar producto perfecto, presentable, porque prevendrás proveer palos, perjuicios, piños, por peña palabras perjudicándote. Pero para poder parar, pausa, para perdonar, piedad, post paranoia prescribo pronto poniendo "para Punisher pon P", puta.

Siempre que recordamos nuestra historia se manifiesta un sentimiento de nostalgia, el pasado siempre fue mejor, no tiene porqué, pero repasar el camino hasta hoy produce esa melancolía. De ese camino por la historia es interesante además observar como hemos cambiado, evolucionado, tanto nosotros como nuestro alrededor. Mi afición por pensar, imaginar y crear junto a mi necesidad de identificación, diferenciación y personalización hacen que busque cualquier pretexto para llevarlas a cabo, como puede ser la insignificante acción de crear una firma para un foro. He recolectado todas las firmas que me he ido haciendo en los últimos 7 años, desde que utilizo el apodo de Punisher, son firmas orientadas a foros de juegos y hardware; pero resulta curioso lo que se puede llegar a deducir..., los recuerdos que me invaden sólo observando esta banal evolución de firmas...